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Andar, es una buena manera de hacer deporte y salir de la rutina diaria, para llegar a lugares en los que la mayoría de las veces merece la pena el gran esfuerzo realizado y el cansancio, para ver esos paisajes, cuevas, ermitas, y muchas otras cosas, que nos ofrece este planeta en el que vivimos.

domingo, 27 de noviembre de 2011

- Ruta San Adrian - Alella 27/11/2011 y 26/02/2012



Ver Ruta en un mapa más grande

A partir de hoy veremos los mapas de las rutas que hemos hecho.
¡¡ Hay que irse actualizando !! 

En el grafico muestra la distancia recorrida y la altitud máxima de la ruta.


En esta ruta también he añadido fotos de otros días que hemos pasado por el mismo sitio que hoy.

Turo de Montcada con el fondo de Montserrat.



Empezamos a subir y ya vemos buenas vistas.

Hay que tomar un poco de aire después de una buena subidita.


El Tibidabo al fondo.
Otro día llegaremos hasta allí andando.



Continuamos hasta el Poblado Ibérico.



El Puig Castellar es un poblado íbero situado en la cima del Turó del Pollo (303 m), en Santa Coloma de Gramanet, en la provincia de Barcelona. Fue creado por la tribu de los layetanos, cuya época dorada transcurrió desde el siglo VI a. C. hasta el III a. C.
Su estructura elíptica consta de tres calles longitudinales con más de treinta casas, es dicha estructura la que hace pensar en una población de poco más de trescientos habitantes.
El Puig Castellar fue descubierto a principios del siglo XX, más concretamente entre los años 1904 y 1905. Ferran Segarra, era el propietario de las tierras en las cuales se encuentra el poblado. En 1917 Ferran Segarra dono los terrenos al instituto de estudios catalanes y estos de 1922 a 1925 se dedicaron a excavar en la zona norte del poblado.
En 1954 el centro excursionista del Puig castellar hicieron varias campañas para terminar de excavar el poblado entero, esto duro hasta 1958.Durante estas excavaciones se encontraron tres hallazgos muy importantes, un Morillo de hierro, la cabeza de Tanit, diosa de la fecundidad en Terracota y un cráneo enclavado, que parece sea debido a una tradición céltica que hacía conservar así la cabeza de los enemigos vencidos. Estos hallazgos que se conservan en el Museo de Arqueología de Barcelona y en el Museo Torre Balldovina de Santa Coloma de Gramanet.




La leyenda del Torrent de les Bruixes.
     
Cuentan las leyendas que hace mucho tiempo en el día de San Juan unas brujas se habían reunido, por la noche, en una montaña alejada al pueblo, para hacer un ritual e invocar al demonio. De repente se abre una brecha en el suelo, y comienza a salir humo negro, y al minuto aparece una persona, con cuernos rojos y un tridente en la mano,  más conocido como el demonio. El demonio les dijo, que esta noche les daría más poder, pero a cambio tenían que robar todas las almas de los niños del pueblo más cercano, Santa Coloma de Gramenet.
Esa misma noche fuero hacia Santa Coloma de Gramenet. Las brujas estuvieron buscando a los niños por todo el pueblo, pero no los encontraban. Entonces las brujas robaron las almas de los mayores y los ancianos, pero cuantas más viejas eran las almas más viejas se volvían.Las brujas se estaban volviendo viejas y los niños volvieron, porque habían huido. Los niños cogieron antorchas y tridentes y se pusieron a perseguir a las brujas.
Estas huyeron montaña arriba, y los niños les estaban siguiendo. De repente las brujas estaban acorraladas en un precipicio de 20 metros de altura y los niños se acercaban con las antorchas. Las brujas, del miedo, no se dieron cuenta y se cayeron por el precipicio y las almas de los aldeanos volvieron. Los niños fueron con sus padres y les dijeron que habían matado a las brujas tirándolas por un precipicio. I los aldeanos decidieron llamar a ese lugar Torrente de las Brujas, o en catalán Torrent de les Bruixes.


    

Entrada del Poblado.




Hay que subir un poco para llegar hasta el mismo Poblado.














Mirador con sus bancos para poder descansar y ver las bonitas vistas que tenemos desde aquí.




Las tres chimeneas de San Adrian de Besos.


Dos buenas vistas desde el Poblado.


Saliendo nos encontramos estas dos placas.



Dejamos atras el Poblado Iberico.


Nos dirigimos aquí.




 

Ermita de Sant Climent

Está situada en la cima de una colina, en el límite con el término de Montcada i Reixac. Se puede acceder por un camino del Puig Castellar.
Fue erigida como oratorio por los monjes de San Jerónimo el año 1673 y en  el año 1980 fue reconstruida por el Centro Excursionista de Badalona. Tiene planta rectangular, con cabecera semicircular, cubierta con bóveda de cañónPreside la fachada un campanario de espadaña hecho con ladrillos.





Dejamos la ermita de Sant Climent y 
nos vamos ahora a Sant Jeroni de la Murtra.


Sant Jeroni de la Murtra

Más de cinco siglos de historia

Sant Jeroni de la Murtra es un antiguo monasterio gótico situado en el Valle de Belén, próximo a la ciudad de Badalona. Perteneció a la orden de los jerónimos y fue fundado, en 1416, por el mercader barcelonés Bertran Nicolau, sobre la antigua casa de Ça Murtra . A partir de esta casa se construyó la iglesia, las celdas, el claustro, el refectorio, la cocina y otras dependencias monásticas.
Los monjes lo habitaron hasta el 1835, fecha de su quema parcial. El incendio destruyó la iglesia, parte del claustro y la Obra Nova y dispersó el archivo y la importante biblioteca que poseían. Afectado por la desamortización de Mendizábal, fue subastado. A finales del s. XIX y principios del XX, residió en el monasterio una interesante colonia de veraneantes. En 1947, la Sra. Francesca Güell i López compró el lote principal para convertirlo en recinto de soledad y silencio y, también,  para conseguir su restauración.
Un hecho notable fue la entrevista de los Reyes Católicos, benefactores del monasterio, con Cristóbal Colón, a la llegada de su primer viaje al Nuevo Mundo, en abril de 1493. Colón se llevó al jerónimo fray Ramon Pané a su segunda expedición, considerándosele primer evangelizador y etnólogo de América por su trabajo con los taínos de La Hispaniola, hoy República Dominicana.
El monasterio es conocido como La Murtra debido al arbusto (mirto) que dio nombre a la antigua casa. Sus flores blancas son símbolo de paz. No obstante, su nombre canónico es Santa María del Valle de Belén. 
También el monasterio estuvo vinculado con el emperador Carlos I en 1536. Durante su estancia preparó la conquista de Túnez.



La boca del león es la fuente.






Un poco más adelante en esta misma pared nos encontramos esta imagen de abajo.



Pasamos por al lado y dejamos atras el Hospital de Can Ruti.




Esta subidita después del Hospital tiene tela marinera, parece que nunca se termine. 




Cogiendo y degustando los Madroños.




La Cartuja de Montealegre,
otro día pasaremos por aquí.


Llegamos a la Conrería. 



Cementerio del Colera.

A pocos metros del albergue de la Conrería, encontraremos un curioso y desconocido recinto funerario: el Cementerio del Cólera. Monumento funerario a los muertos por la fiebre amarilla de 1870.
En el año 1870 se declaró una epidemia de cólera o fiebre amarilla en el barrio de la Barceloneta en Barcelona debido a una nave posiblemente infectada que provenían de la isla de Cuba. A pesar de los esfuerzos de las autoridades, la epidemia comenzó a extenderse a lo largo de la ciudad de Barcelona. A modo de ejemplo, indicamos que la Junta Provincial de salud decretó alejar todos los barcos del puerto de la Barceloneta ya que muchos trabajadores portuarios habían caído enfermos.El pánico se apoderó del barrio y emigraron once mil vecinos, que se dirigieron hacia los pueblos de Valles, de la costa o a la Villa de Gracia. La situación se hizo tan insostenible que el 22 de septiembre, el ayuntamiento y la Junta de sanidad ordenaron el desalojo forzoso de toda la Barceloneta. Se decidió entonces, establecer una colonia sanitaria en las antiguas dependencias religiosas de la Conreria para trasladar las familias sin recursos y jóvenes procedentes de la casa Provincial de Corrección, desaparecido correccional y prisión de Ciutat Vella. Esta colonia de la Conreria alojara 1.693 personas, entre las cuales habían 94 reclusos que se repartían entre el edificio del antiguo seminario y el convento. El médico responsable era el Dr. Pelegrí Giralt, con la asistencia de enfermeras y sanitarios. Estuvieron desde el 23 de septiembre al 10 de diciembre de 1870. El 29 de septiembre, se produjeron las dos primeras muertes por el cólera, pero también hubo 16 muertos por la viruela y otras muertes por enfermedades comunes. La epidemia se declaró terminada el 7 de diciembre, y poco a poco, los vecinos de la Barceloneta pudieron volver a sus casas. Habían fallecido 76 personas.
El recinto funerario del que se habla, es la fosa común de los barceloneses ingresados en el sanatorio. Consta de una parcela de unos 20 m x 11 m, cerrado por un muro de piedra de un metro de alto aproximadamente. Actualmente no hay puerta de entrada, pero parece que podría haber tenido una pequeña. Una vez dentro, el único elemento que encontramos es un monumento de piedra cilíndrico de poca altura unos 40 cm, sobre una base con un diámetro de entre 1,70 m y 2 m y un peso de 700 kilos. El círculo se divide en cuatro cuadrantes en los cuales se alternan el símbolo del calavera y el reloj de arena alado. En el centro veremos el escudo del ayuntamiento de Barcelona, rodeado por la inscripción "Colonia de Montalegre. El Ayuntamiento de Barcelona a las víctimas de la fiebre amarilla de 1870 ". El monumento fue erigido el 25 mayo de 1871. El cementerio del cólera está ubicado en la parte inferior del Turó del Reig, sobre el Coll de Montalegre.


Aqui esta el cementerio con la losa de piedra.







Dejamos atras el cementerio y nos dirigimos hasta Alella.




Un buen ejemplar y comestible.




El camino que nos queda es bueno, y no hay muchas pendientes.



Se nota que nos acercamos a Alella.


Ya estamos cerca de Alella.





¡¡Y como no!!, después de esta caminata no esta mal una cerveza bien fría, antes de llegar a la estación de tren de Masnou para llegar a casa.